La coordinadora provincial de Izquierda Unida en Almería, María Jesús Amate, ha calificado de “profundamente irresponsables” las declaraciones del delegado territorial de Salud, Juan de la Cruz Belmonte, tras asegurar que en la provincia no existen casos afectados por los fallos en los cribados de cáncer detectados en Andalucía.

“Negar de esa forma que pueda haber afectadas, sin haber investigado a fondo, es una falta de respeto hacia las mujeres que llevan días con miedo, revisando sus informes o esperando una llamada que nunca llega”, ha lamentado Amate.

Desde Izquierda Unida explican que, tras hacerse público el fallo en los programas de detección precoz, han recibido mensajes de mujeres de distintas zonas de la provincia que, pese a haberse hecho una mamografía hace meses, ahora están siendo citadas de nuevo para repetir las pruebas. Algunas, dicen, han optado por acudir a la sanidad privada, porque no se sienten seguras ni respaldadas por la gestión del Gobierno andaluz.

“Hay mujeres que están pasando por esto en silencio, dolidas, confusas y con la sensación de que se les resta importancia!, explica Amate. “Y lo peor es escuchar a responsables públicos decir que aquí no pasa nada, cuando hay mucha gente viviendo estos días con una angustia que no les deja dormir”.

La dirigente de IU también ha criticado el negocio del miedo que han promovido algunos centros privados, que en cuanto estalló la crisis anunciaron pruebas ‘en un día’. “Es indignante ver cómo se mercantiliza la ansiedad de las mujeres. Mientras unas intentan entender si su prueba fue fiable, otros ven una oportunidad de negocio”, ha denunciado.

Amate subraya que esta situación “no ha caído del cielo”, sino que es consecuencia directa de años de desmantelar la sanidad pública en favor de la privada. “Se han ido quitando recursos, personal, medios diagnósticos, mientras se abrían puertas giratorias y conciertos millonarios con clínicas privadas. Han dejado la sanidad pública tan debilitada que ahora la única salida que muchas ven es pagar de su bolsillo para tener una prueba que debería ser un derecho”, ha señalado.

“Y lo más grave es que todo esto sucede mientras el PP actúa como marioneta de las empresas privadas del sector sanitario. Ellos hacen caja y las familias trabajadoras pagan las consecuencias. Es un modelo que deja fuera a quien más necesita cuidados” ha denunciado Amate.

La coordinadora ha insistido en que el único mensaje aceptable en este momento  debe venir de las instituciones públicas verdaderamente comprometidas con la salud de las mujeres, no de las clínicas privadas ni de quienes repiten consignas oficiales sin empatía. “El mensaje debería ser claro: ponemos todos los recursos públicos a disposición de quien tema estar afectada y abrimos ya una investigación seria para depurar responsabilidades”, ha afirmado. “Eso es lo que la gente espera: empatía, no complacencia”.

Además, ha lamentado la actitud de quienes, en lugar de acompañar a las afectadas, “han preferido ponerse de perfil y seguir el discurso del delegado”. “Es muy triste ver cómo, en un momento así, hay quien elige quedar bien con el poder en lugar de ponerse del lado de las mujeres que lo están pasando mal”, ha concluido.

Izquierda Unida en Andalucía ha llevado el caso de los cribados del cáncer de mama a la Fiscalía, así como la provincialización de los datos en el cribado del cáncer de mama, cérvix y próstata y una comisión de investigación en el parlamento andaluz a través de la coalición Por Andalucía, de la que forman parte.

“Si aparece un solo caso en Almería, espero que quienes niegan los fallos dimitan. No se trata de números, se trata de vidas”, ha cerrado Amate.