El pasado septiembre 11 profesionales de las universidades de Málaga, Granada y Almería remitieron a la Junta de Andalucía su preocupación por la situación crítica de las lagunas Honda y Nueva de Adra, conocidas como las Albuferas, “comparándolas con el Mar Menor por el nivel de contaminación que concentran aún siendo un lugar protegido por varias administraciones y teniendo fauna endémica en muy grave peligro de extinción”, ha señalado María Jesús Amate, coordinadora provincial de Izquierda Unida Almería, “razón por la que el Grupo Parlamentario Por Andalucía, en el que se integra nuestra organización, ha registrado una pregunta dirigida a la Consejería de Medio Ambiente”.

“Nos parece alarmante la situación a la que se está llegando y cómo se deja perder nuestras joyas naturales, las herramientas más valiosas que tenemos para luchar contra el cambio climático” ha comentado Amate, quien ha asegurado que desde sus siglas “se va a estar muy vigilante, porque el papel todo lo aguanta pero no nos fiamos de un PP que es un negacionista y al final todo queda en agua de borrajas” razón por la que han afirmado que “este es el primer paso y se tocarán cuantas puertas sean necesarias, nacionales o europeas, para intentar salvar las Albuferas”.

Según la coordinadora de izquierdas, “para la provincia de Almería es doblemente duro ver cómo las Albuferas están en una situación crítica y como otros humedales como Punta Entinas, la Rambla Morales, el Salar de Los Canos y las de Cabo de Gata están en una situación similar cuando el consejero de Medio Ambiente y portavoz de la Junta de Andalucía, el señor Fernández-Pacheco, es paisano, y se hubiera esperado un poco más de sensibilidad hacia sus vecinos más directos”.