La coordinadora de Izquierda Unida en la ciudad de Málaga, Remedios Ramos, califica de “irresponsable la actitud del Partido Popular y el resto de grupos de la derecha en el Congreso de los Diputados que están amenazando con no apoyar una nueva prórroga del estado de alarma por el Covid-19 movidos por mezquinos intereses partidistas, instalados en la crítica corrosiva y continua al gobierno, en el cuanto peor mejor, aunque esto suponga disparar el riesgo de nuevos contagios y la desprotección social de la población”.

Ramos tiene claro que “el estado de alarma es la principal herramienta para combatir la pandemia y la crisis que ha provocado, por lo que, si el Congreso no la aprueba mañana, tres millones y medio de personas perderán su escudo social, sus únicos ingresos y la responsabilidad será del PP y del resto de partidos que no lo respalden. En Málaga, una ciudad receptora de personas, el fin precipitado de la alarma conllevaría aún consecuencias más graves, ya que aumentarían los contagios”.

Ramos explica que el cese del estado de alarma “acarrearía la desaparición de la protección contra el despido por el Covid-19 y el procedimiento simplificado de acceso a ERTEs y la prestación por desempleo por fuerza mayor, que ahora se garantiza automáticamente. Así como las condiciones favorables de acceso a la prestación por desempleo y la agilización de su cobro. También hay que explicar que en el contexto del estado de alarma el tiempo de desempleo por ERTEs no computa para futuras prestaciones de desempleo y si desapareciera, el desempleo cobrado sí reducirá futuras prestaciones”.

Desde IU Málaga se apuntan “otras consecuencias negativas para colectivos concretos: los autónomos, perderían las condiciones especiales de acceso a la prestación por cese de actividad; las empleadas de hogar la prestación extraordinaria; también se quedaría sin efecto la prórroga automática de los subsidios de desempleo; saldrían perdiendo las cooperativas, que se quedarían sin las medidas específicas para el destino de parte de sus fondos para paliar pérdidas y las empresas no tendrían la exoneración de cuotas empresariales a la Seguridad Social respecto a las personas trabajadoras afectadas por ERTEs”.