Ahumada exige a la Junta “rigor, seriedad y responsabilidad” en el proyecto de la EDAR Norte

“Un macroproyecto que nace obsoleto, con un 25% menos de capacidad que el originario de hace 15 años, y que plantea numerosas dudas por su modelo, ubicación, aprovechamiento e impacto ambiental”

El diputado andaluz y coordinador provincial de Izquierda Unida, Guzmán Ahumada, ha presentado esta mañana en rueda de prensa las alegaciones que va a realizar al proyecto de la EDAR Norte, “un proyecto obsoleto antes de su ejecución y que atenta gravemente contra la sostenibilidad de una de las zonas verdes más importantes de la provincia como es el Guadalhorce ante el riesgo de contaminación y vertidos, vertidos por los cuales ya estamos recibiendo además sanciones desde la Unión Europea”.

“Una vez más”, en palabras de Ahumada, “este gobierno que se vende primero del cambio y ahora como el de la anticipación, demuestra que ni lo uno ni lo otro y el proyecto de la depuradora es una muestra más de ello, un macroproyecto que nace obsoleto, con un 25% menos de capacidad que el originario de hace 15 años, y que plantea numerosas dudas por su modelo, ubicación, aprovechamiento e impacto ambiental”.

Ahumada ha subrayado que “ponemos sobre la mesa con este tema una cuestión que nos preocupa, porque si bien es cierto que llevamos años reclamando esta necesaria infraestructura, este proyecto de la Junta acarrea unas posibles consecuencias medioambientales muy serias e incide directamente sobre el turismo ya que son las playas las que sufren el vertido de estos residuos directamente en el mar”.

“Esta infraestructura nace muerta, porque esos 75.000 m3 diarios previstos en el proyecto ya se producen hoy, y en el mejor de los escenarios, que esta depuradora esté en funcionamiento a finales de 2025, ya existiría en la comarca mayor población y, por lo tanto, más volumen de residuos vertidos, con un cálculo aproximado de 120.000 m3 al día”, ha apuntado el coordinador provincial de IU.

Por su parte, la diputada provincial, Teresa Sánchez, ha incidido en que “nos encontramos con un problema añadido, ya que, lo que en principio podría ser una ventaja, que sería aprovechar las sinergias entre una depuradora y otra, se transforma en una desventaja, que se encuentran a 7 kilómetros de distancia con dos estaciones de bombeo intermedias, lo que significa que si viene una riada de agua puede llevarse las canalizaciones por delante y dejar inutilizada esta EDAR Norte”.

“Esto, el delegado provincial de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible en la provincia y ex alcalde de Coín, Fernando Fernández, lo sabe bien, porque la agrupación de vertidos de Coín, Álora y Pizarra ha tenido estos problemas y hoy por hoy el municipio de Coín sigue vertiendo libremente sus aguas residuales al río porque la primera riada que hubo se llevó por delante esa canalización que llevaba los vertidos hacia la depuradora”, ha recordado Sánchez.

Francisco Llagas, Coordinador de Izquierda Unida en la comarcar del Guadalhorce, ha incidido en el riesgo sobre la sostenibilidad que presenta el proyecto “ubicado en una zona inundable, sobre una finca agrícola, en una vía de intenso desagüe, con 40 kilómetro de tuberías, que exigen estaciones de bombeo de alto consumo energético”.

“Desde IU hemos apostado siempre por depuradoras en las cabeceras municipales, más pequeñas, sin tanta infraestructura, menos costosas, sin tanta interdependencia y que permiten la reutilización del agua y completar así el ciclo de la misma”, ha apuntado Llagas.

Además de las ya señaladas, dentro de las alegaciones se denuncian defectos de forma en el procedimiento con un expediente incompleto, dificultades de acceso al mismo o distintas versiones de documentos, para lo que se solicita que se corrijan los fallos expuestos y se someta el expediente, una vez revisado, a nuevo periodo de Información Pública.

El proyecto, presenta también dudas relativas al peligro de inundación, a su vinculación y dependencia de la depuradora del Guadalhorce,  sobre el tratamiento de los fangos o el destino del biogas. Además es un proyecto técnicamente complicado y muy sensible a accidentes, y de mantenimiento muy costoso.